El PP anima a la Xunta a demandar al Ayuntamiento por el nuevo hospital

La oposición opina que la privatización invalida el convenio con el Concello


Hace pocos meses, en el PP no eran capaces de comprender cómo un hospital en obras les hacía perder tanto capital político. En ninguna parte se construyen hospitales, en algunas comunidades incluso se paralizan, y en Vigo se construye, pero hay manifestaciones en contra, hay debate ciudadano, hay inquietud social, la oposición se pone detrás de las pancartas y el alcalde aprovecha cualquier intervención para protestar por el «hospital privado de Vigo», como hizo ayer mismo. Por eso los populares llevan muchos meses tratando de que la mayor obra que impulsa la Xunta se convierta en un activo.

El PP lleva meses espoleando a la Xunta para que lleve al Concello a los tribunales por incumplir el convenio firmado en el 2006 que obligaba al Ayuntamiento a llevar a la parcela de Beade servicios básicos como el agua, la electricidad, el saneamiento, la fibra óptica y otros. Ayer el diputado Miguel Santalices defendió una proposición no de ley para que la Xunta «autorice accións para cumprir o estipulado», y citó en varias ocasiones de su discurso «levalo aos xulgados».

Aquel convenio firmado por dos conselleiras del PSOE en la Xunta y una alcaldesa del PP contempla la posibilidad de reclamar su cumplimiento por la vía contencioso-administrativa. Pero a ningún grupo de la oposición le vale tal argumento. Todos ellos coinciden en que la Xunta promueve «un hospital privado» y que eso ya de por sí invalida el acuerdo.

PSOE, AGE y BNG reclaman el rescate de la obra para que sea la Xunta quien lo construya. «O Goberno ten instrumentos para continuar a obra», defendió Eva Solla (AGE) en la Cámara. Carmen Acuña (PSOE) vaticinó que ese será el destino más probable de la obra, el rescate. Carme Adán (BNG) recordó que la suspensión de pagos de la empresa OCA es otro problema añadido.

Los populares han aparcado su propuesta de que la Xunta detraiga al Concello la cantidad equivalente al coste de la dotación de servicios, estimada en cinco millones, ahora que el Servizo Galego de Saúde ha asumido esa parte de la obra.




Fuente: LVG