Abel Caballero propició el mayor 'pucherazo' del PSOE

Pese a la sucesión de irregularidades, los críticos lograron el 20 por ciento de delegados

El mayor 'pucherazo' de la historia del PSOE de Vigo, partido acostumbrado a los sobresaltos, se consumó ayer en una asamblea local en la que la dirección local, que preside y maneja Abel Caballero, se saltó todas las normas remitidas por la dirección gallega y propició que se celebrará una votación sin garantías democráticas.

Pese a ello, el sector crítico logró aguantar y superar el 20% de votos, umbral que da derecho a representación en el congreso provincial, previo al federal, lo que trataron de evitar los oficialistas. Finalmente, alcanzaron el 25,5 por ciento con 180 votos y siete delegados, lo que celebraron como un auténtico éxito. Abel Caballero y los suyos obtuvieron 533 y los otros 21 representantes.

Hubo militantes en teoría suspendidos que votaron -como el pedáneo Roberto Ballesteros- y un grupo de unas 200 personas, muchos jóvenes de origen sudamericano, que nadie entre los veteranos conocía y que acudió a las urnas, en casos comprobados sin acreditar su carné. Hubo también agresiones y la presencia de una patrulla de la Policía Nacional. Y además, se impidió a los críticos que pudieran vigilar con interventores las diez mesas instaladas -lo hizo David Sueiro, quien ya fue advertido por la dirección gallega por otro comportamiento irregular- y en cambio sí se dejó que los afiliados acudieran ante las urnas a cualquier hora, pese a las directrices al respecto del PSdeG. 

EL MAYOR ESCÁNDALO

En definitiva, como dijo Gonzalo Caballero, líder del sector crítico, 'ha sido el mayor escándalo y la mayor vergüenza de la historia del PSOE en Vigo'. Por supuesto, este sector ya anunció la impugnación del acto por flagrante vulneración de todas las directrices.

En cuanto a los resultados, otra sorpresa: a la hora de la asamblea había poco más de 300 personas. La prueba, que la gestión de la dirección federal salió adelante por un marcha de 110 contra 200 votos. Pero 'milagrosamente' al final hubo otras cifras muy distintas (713 papeletas) gracias a que contraviniendo las órdenes se permitió -e incluso alentó- el voto en cualquier momento. De hecho a partir de las nueve de la noche llegaron grupos enteros de supuestos militantes para hacer cola, en apariencia totalmente ausentes a la asamblea.

Gonzalo Caballero estaba exultante al final, cuando poco antes de medianoche se conoció: 'Es un éxito. Pese a todas las trampas de la dirección política de Vigo, la alternativa socialista sigue adelante, aguanta, y se mantiene como bandera tanto en Vigo como en Galicia'.

Carlos Príncipe, también en el sector crítico, se mostró muy satisfecho. 'Resistir es vencer. Hoy (por ayer) hemos conseguido resistir el mayor pucherazo y mañana cambiaremos el partido para devolvérselo a Vigo. Es camino será largo pero venceremos'.

ballesteros votó y también no afiliados

El pedáneo de Bembrive, Roberto Ballesteros, a quien Abel Caballero dio por suspendido de militancia a raíz del escándalo en la entidad Menor, también pudo votar. Él mismo lo reconoció: nadie le dio de baja del partido. No fue el único en su condición. Julia Lago, exdirigente local, pudo comprobar cómo cinco jóvenes que estaban delante en la cola (cuatro chicos y una chica, todos ellos sudamericanos) renunciaron a acudir a la urna cuando admitieron que no eran militantes del PSOE. En realidad, apenas sabían qué hacían allí. Lago les advirtió de que no estaban en unas elecciones municipales, sino en un acto interno del partido socialista, lo que al parecer desconocían. 'Es muy triste que pase esto en mi partido. No entiendo cómo desde la dirección local se permite esto. No es bueno para nadie', se lamentaba. ¿Y Abel Caballero? Feliz al ver el éxito de su candidatura, que se llevó 21 de los 28 representantes que se elegían para el congreso provincial, que a su vez escogerá 17 delegados para el federal de Sevilla. El presidente del PSOE vigués no quiso posicionarse sobre Rubalcaba o Chacón, aunque todo indica que finalmente apoyará al primero. Dice que su papel ahora es 'nucleador' de los 2.500 alcaldes socialistas. 

La Polícia intervino por la denuncia de una agresión en sala

La nota negra fue la aparición de una patrulla de la Policía Nacional que acudió tras la llamada de un militante histórico de A Salgueira. Una afiliada del sector crítico de 70 años que actuaba de apoderada aseguró ser objeto de una agresión por Manuel Rey, de la dirección local, quien la habría empujado para que no hiciera su labor de control del acto, amparada por las normas del PSdeG. Los agentes se presentaron, subieron acompañados de personal del hotel, tomaron nota del denunciante y al denunciado y se marcharon sorprendidos: no sabían que se trataba de una reunión del PSOE.

Otro momento llamativo fue cuando se votaron las enmiendas: todas las presentadas por los críticos, tanto por Carlos Príncipe como por Antonio Chaves, fueron aprobadas por la ejecutiva sin votación ni discusión: serán rechazadas ene l congreso provincial. Entre las más llamativas, la de Chaves, quien exige que se expuse a los militantes con dos cargos: 'Acabamos de aprobar expulsar a Carmela Silva', ironizó. Príncipe logró el visto bueno a crear una banca pública.

Fuente: Atlantico Diario